Estudiantes de la UNA participaron en panel sobre ecosistemas resilientes y Seguridad Alimentaria

Estudiantes del Departamento de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional Agraria (UNA) participaron en el panel titulado “Promoviendo Ecosistemas Resilientes como Base para la Seguridad Alimentaria y el Crecimiento Económico Sostenido de Comunidades Rurales de Río San Juan”. La actividad académica fue organizada por la UNA y la asociación Amigos de la Tierra.

El evento que se desarrolló en el auditorio Guayacán contó con la presencia de investigadores especialistas en fauna silvestre, alimentos para ganado y otras áreas relacionadas. Este panel resultó ser una oportunidad valiosa para el intercambio de conocimientos entre los estudiantes y los investigadores.

“Este es un evento formidable porque estamos dialogando directamente con nuestros estudiantes, compartiendo los resultados de nuestras investigaciones y recibiendo retroalimentación a través de sus preguntas e inquietudes. Esto no solo enriquece nuestra labor, sino que también nos ayuda a enfocar y redireccionar nuestras investigaciones”, comentó Miguel Ángel Garmendia Zapata, maestro del Departamento de Ciencias Ambientales y Cambio Climático de la UNA.

La información proporcionada durante el panel resultó crucial para los universitarios, quienes ahora cuentan con datos actualizados para fortalecer su plan de estudios. Este conocimiento les permitirá ofrecer escenarios reales y pertinentes sobre las condiciones en las que trabajan los productores en sus áreas de cultivo.

“Como estudiantes, llevamos la responsabilidad de ofrecer soluciones a los agricultores. Muchos de ellos, debido a la falta de conocimientos, no aplican técnicas para mejorar la seguridad alimentaria o el mejoramiento genético de las semillas; por ello, nuestra obligación es proporcionar respuestas a estos desafíos”, expresó Justin Enrique Rodríguez González, estudiante de Ingeniería Agropecuaria.

A través de estas actividades, se manifiesta la importancia de generar estrategias que aporten a las políticas de Gobierno para garantizar la seguridad alimentaria, el mejoramiento genético y la transferencia de tecnologías para agricultores y pequeños productores. Los conocimientos adquiridos pueden ayudar a prevenir pérdidas en los cultivos y mejorar la eficiencia en las prácticas agrícolas.